Este resumen del día lo hago desde el camarote del ferry que me lleva a Travemunde.
Madrugué con ganas de ir sobrado de tiempo al check-in después de experiencias anteriores y también porque no estaba nada a gusto en el B&B-zulo de Porvoo que aunque sale en la guía Lonely planet es una mi… y cara.
Desayuné en una gasolinera unos kilómetros antes de entrar en Helsinki.
Lo que me costó encontrar esta terminal |
Voy directo a la terminal (Finnlines) siguiendo las directrices del GPS … y la terminal está clausurada desde hace mes y medio. El mismo cartel te pone un número de teléfono en el que sale una grabación en finés diciendo el nuevo lugar de embarque, o sea… como si ná. Comienza mi mala suerte con los ferries una vez más. Empiezo a preguntar a varias personas de la zona y ni flowers. Tiro a ver las terminales de Silja y Viking por si veía el de Finnlines… como son tan “pequeños“. No me quedó más remedio que pasar por la zona del mercado del puerto en la que ya había estado hacía 15 años y que si no fuese por las prisas me hubiese gustado dar un paseillo. El caso es que ná de ná y el tiempo seguía pasando y yo motoconvenciéndome de que tenía 2 horas de margen y en ese tiempo podía dar la vuelta a la ciudad seis veces. Acabo preguntando de nuevo en una gasolinera y un currante muy majo me dice que la nueva terminal está a 15 kilómetros dirección Porvoo (donde dormí!!) y siguiendo sus instrucciones y el GPS tiro hacía el destino, el cual tiraba finalmente en dirección norte hacía el aeropuerto, momento en el cual ya empiezo a mirar el reloj más a menudo y a dar media vuelta puesto que lo que estaba claro es que el ferry saldría desde el mar, no del aeropuerto ( el tío entendió terminal aérea en vez de marítima?).
Salimos rumbo a Alemania. |
Vuelvo los otros 15 km al tío y me dice que iba bien pero que deben de haber cambiado las direcciones por lo que me lo muestra en su mapa del móvil y yo lo paso a mi GPS. Entra mientras tanto un alemán con toda la prole preguntando lo mismo y me pide seguirme (como para perderme de nuevo). Al final me siguen dos coches y esta vez llegamos directos. Tan solo 20 minutos de espera en la cola para embarcar en los que charlo con un finlandés que empezaba viaje hacia Holanda en una bici clásica que le había costado 60 €. Por lo visto le gustaba viajar en bicis antiguas y era miradillo por la pasta porque me preguntó cuánto pagaba por llevar la moto, cuanto consumía y me dijo que una vez compró una bici por 22 €… pó vale.
En cuanto até la moto en el ferry (esta vez imposible que me caiga, solo falta que le caiga al de al lado y le dé a la mía) fui directo al camarote a pegarme una ducha, que la necesitaba, y menudo camarote!! Amplio con baño cojonudo, tele (vi el gran premio de Europa de F1 en valencia) y ventanal al mar.
Islas Finlandesas. |
No es tan grande el ferry como otros en los que estuve pero sí es muy alto (12 pisos) y estoy en el 7º, la misma planta donde está el garaje de la moto. Por desgracia no tiene internet con lo cual no puedo aprovechar para buscar más alojamiento para los próximos días en Alemania y Francia… tendré que ir a vista. Aunque el próximo, en Lübeck, ya lo tenía reservado.
Parece ser que me va a tocar ola de calor y tormenta los dos próximos días así que a quitar el forro a la chaqueta y tener a mano el traje de lluvia.
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